LA PARADOJA DE STOCKDALE

Por Jorge Manuel Zelaya Fajardo

www.jorgemanuelzelaya.com

Febrero 12, 2020

La primera vez que escuché sobre la paradoja de Stockdale fue cuando descubrí el concepto en la lectura  de uno de los  capítulos  del libro Good to Great (2001)  escrito magistralmente por el autor norteamericano Jim Collins. El concepto capturó de inmediato mi atención porque su origen provenía del pensamiento de James Stockdale , un condecorado  prisionero de guerra de Vietnam por más de siete años. 

Sin embargo para poder entender la paradoja de Stockale en su plenitud semántica, debemos definir paradoja y conocer un poco al vicealmirante Stockdale. El termino paradoja puede definirse como aquellas expresiones o frases que encierran una aparente contradicción entre sí, teniendo un uso casi mágico en ciertas piezas de literatura. Ahora bien, las personas que usan paradojas tienen una particular destreza para lidiar de manera efectiva con la ambigüedad, volviéndolos más adaptables al cambio, menos temerosos al riesgo y con cierta inclinación a la acción enfocada. Por otro lado James Stockdale ( 1923-2005) fue un Vicealmirante  y Aviador de la Fuerza Naval de los Estados Unidos de América, habiendo peleado en la Guerra de Vietnam, donde fue prisionero de guerra  por más de siete años en la famosa prisión conocida como ¨Hanoi Hilton¨en la capital de Vietnam.

La paradoja de Stockdale establece : ¨  Nunca debe nadie  confundir la fe de que uno  prevalecerá al final, ---lo que nunca puede permitirse perder--,  con la disciplina para enfrentar los hechos más brutales de su realidad actual, cualesquiera que sean".

Para un optimista confeso y  empedernido como yo, esas palabras redefinieron para mi el concepto de ser optimista. El mismo Stockdale aseveraba que eran los optimistas los que no lograban soportar hasta el final en la prisión, porque de una manera ingenua se ponían fechas posibles de realidades fuera de su control que no se cumplían. Y al no cumplirse se frustaban y deprimían.  Entonces me pregunté : ¿Ser optimista es ser ingenuo y ser pesimista es ser realista?

Pero la respuesta a esa pregunta está en la misma esencia de Stockdale que hizo germinar el concepto durante incansables e insoportables torturas por los oficiales vietnamitas.

Hoy lo veo con absoluta claridad, exigiéndome el concepto mismo,  una aplicación práctica inmediata.

La paradoja de Stockdale operacionalizada es : Tener una inmensa fé de que lo lograremos, pero conscientes de la cruda realidad frente a nosotros. Tener soberbia motivación intrínseca de que llegaremos, pero con profunda humildad de aceptar la dura realidad. Tener una fé inclaudicable pero sin maquillaje de lo que pasa hoy y aquí. Tener una esperanza inextinguible pero teniendo claro que será impresionantemente difícil lograrlo.

Los seres humanos evitamos el dolor por naturaleza. Muy probablemente la razón esté codificada en la parte de nuestro cerebro reptiliano  ubicado en la parte baja del cerebro, el cual está formado básicamente por los ganglios basales, el tronco del encéfalo y el cerebelo. Es ahí donde la operación ¨volar o pelear¨ está programada. La dura realidad que a veces nos toca vivir, es con frecuencia maquillada, ignorada o negada ( me declaro culpable en más de una ocasión de hacer eso). Una realidad muy dura provoca emociones y sentimientos que navegan desde desánimos y contrariedades hasta padecimientos serios como depresiones prolongadas.

Por eso precisamente es tan importante la paradoja de Stockdale, pero sobre todo para poder aplicarla a nuestra vida personal y profesional. Ese pensamiento es muy congruente con el estoicismo ( escuela filosófica fundada en el antigua Grecia por Zenón de Citio) cuyos  exponentes destacan Séneca, Marco Aurelio y Epicteto entre otros. Dicha filosofía establece, de manera muy resumida,  que se debe buscar dominar los hechos y pasiones que nos afectan, aferrándonos  a la valentía, razón y carácter personal.

Hoy dia, desde la amenaza  de una epidemia mundial hasta una crisis política doméstica, desde un problema familiar hasta una decisión individual, estamos retados permanentemente a poner en práctica la paradoja de Stockdale. El mejor paso que podemos dar, es ponerla en práctica y evaluar los resultados.