Por Jorge
Manuel Zelaya Fajardo
www.jorgemanuelzelaya.com
Agosto 13, 2019
El
ser humano siempre ha tenido una fascinación por desafiar récords establecidos
y cuando hablamos del récord del edificio más alto del mundo, dicho título recae hoy día en el edificio BURJ KHALIFA , construido en la parte central
del Downtown Dubái ( un megaproyecto de varias etapas y conceptos) en la
República de Emiratos Árabes Unidos.
El
BURJ KHALIFA es sencillamente impresionante. Ya sea que lo midamos en números o
en letras, en estética o funcionalidad, en altura máxima o en su cimentación.
Con 828 metros de altura, el edificio supera a 9 edificios mayores de 500 metros
de altura ubicados de manera separada en diferentes países como China, Arabia Saudita,
Corea del Sur y Estados Unidos. Su construcción tomó 5 años 4 meses con un
presupuesto de 1.5 billones de dólares empleando a más de 12,000 trabajadores
en todo su proceso de construcción.
Desde
el punto de vista de la arquitectura, su diseñador, el arquitecto norteamericano Adrian Smith , diseñó
la base del edificio con la forma
geométrica de una Hymenocallis (flor blanca de 6 pétalos cultivada en la
región de Dubái y la India.)
Desde
el punto de la ingeniería, la estructura cuenta con números inverosímiles: una cimentación de 12,000 m3 de concreto con
196 pilotes, un sistema de eficiencia energética de altísimo rendimiento y
protocolos de seguridad de primer nivel, para los 160 pisos habitables (49
pisos para oficinas y 61 para apartamentos.)
Como
ingeniero civil (en mi formación de pregrado) esta obra simplemente me
cautiva por su majestuosidad, dimensiones y altura. Sin embargo, como ser
humano, hay tres puntos en los cuales creo que el BURJ KHALIFA
me ha dejado un aprendizaje:
Primero: los
límites del ser humano están hechos para expandirlos, o por lo menos para
intentarlo seriamente. El BURJ KHALIFA es hoy día el edificio más alto del
mundo, dejando atrás a varios edificios insignes que por mucho tiempo reinaron
en el mundo por su altura: El Empire
State Building, la Torre Sears, Las Torres Petronas y el Taipei 101. Sin
embargo, hoy día se está construyendo el JEDDAH TOWER en Arabia Saudita que se
espere alcanzar los 1000 metros de altura. Mas de alguno pensaremos que la
competencia por hacer el edificio mas alto del mundo no es la más sensata de
las competencias, pero en el fondo desafía lo existente y lo probable, lo económico
y lo viable. Lo sostenible y lo temporal. El potencial humano puede expandir sus
limites.
Segundo:
en mis clases de Gestión de la Calidad,
enseñamos que todo proyecto debe reunir tres características irrenunciables: a)
Terminar a tiempo, b) Dentro de presupuesto y c) Poseer alta calidad. Y aunque
parecieran estándares fáciles de alcanzar, son SUMAMENTE difíciles de lograr al
mismo tiempo en un mismo proyecto (como en el caso particular del BURJ
KHALIFA). El potencial humano debe buscar alcanzar y desarrollar su
máxima capacidad con estándares simples y claros.
Tercero: para llegar a la cima de
algo, debemos subir paso a paso. El ejemplo no
puede ser mas cristalino que en el BURJ KHALIFA. Son 2909 gradas para llegar a
la cima, y aunque es muy poco probable que alguien lo haga por ese medio, el
concepto aplica perfectamente. Todos podemos poner un pie enfrente del otro para buscar aún la
meta más alta.
La
vida esta llena de proyectos. Tal vez no tan majestuosos como el BURJ KHALIFA,
pero he llegado a creer que la vida misma, ES EL PROYECTO MÁS VALIOSO EN SI
MISMO.
Excelente artículo, nos pasamos la vida tratando de conocer nuestros límites sin darnos cuenta que estos siempre de pueden expander.
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